Del Potro fue pura garra y corazón pero no le alcanzó

El Court Central del All England Club fue testigo de un enfrentamiento memorable en el tenis olímpico. Juan Martín Del Potro y Roger Federer protagonizaron un verdadero espectáculo de más de cuatro horas en el césped londinense, tiempo récord en un partido de Juegos Olímpicos. A pesar de la derrota, la Torre no se achicó en ningún pasaje del partido y batalló hasta el último suspiro, pero no alcanzó. Perdió por 3-6, 7-6 (7-5) y 19-17 en más de cuatro horas de juego.
En el primer set no se sacaron ventajas durante los primeros seis games, pero Del Potro quebró el servicio del suizo en el séptimo y se adelantó 5-3 para luego definir en el siguiente juego, utilizando su mayor arma de ataque: su altura y la potencia del saque.
El segundo fue mucho más igualado. Juan Martín no pudo quedarse con el servicio y Roger definió en el tie break. El set decisivo no bajó de intensidad. Federer le quebró el servicio en el 9-9 y sacaba para partido, pero el argentino reaccionó y se llevó el game para quedar 10-10. Finalmente, cuando iba 17-17 Federer consiguió su break point y se quedó con la última manga por 19 a 17.
Fue uno de esos partidos que quedan en la memoria de cualquiera que lo haya visto. Del Potro perdió, pero tuvo un altísimo vuelo tenístico y complicó en varias oportunidades al mejor jugador de la historia, que volvió a agigantar su leyenda.
La final se jugará el domingo y el rival de Federer saldrá del partido entre el escocés Andy Murray y el serbio Novak Djokovic. El tandilense jugará ante el perdedor por la medalla de bronce.